El Jugger se trata de un deporte de nueva modalidad, que surge en Alemania en torno a los años 90'.
El primer partido documentado de éste deporte tuvo lugar en 1993, en Berlín. En 1995 se realizó el primer torneo de Jugger, en Hamburgo. En 1998 se creó el Campeonato Alemán y en el 2003 se fundó la Liga Alemana de Jugger (la Jugger League). En 2007 se realizó el primer torneo internacional alemán, año en el que también se creó la Asociación de Jugger (Jugger e.V.), que logró la oficialización definitiva del Jugger en Alemania.
Su desarrollo a España no llega hasta el 2008, a través de la Asociación zaragozana Dado de Dragón. Un miembro de dicha asociación (Santiago García -Old Ducks-), fue quien tradujo el reglamento Alemán (tras ponerse en contacto con Ruben Wickenhäuser -Falco Jugger-) para poder llevar a cabo la práctica del deporte, por aquel entonces en el parque Torre Ramona.
Zaragoza fue desde donde se extendió al resto de España, primero Madrid, luego Valencia, Lérida, Cantabria, Bilbao, Barcelona, Asturias y demás sitios.
Un paso por la HISTORIA.
El Jugger consiste en una actividad física que mezcla elementos de pelota (como pueden ser el fútbol, baloncesto, hockey…), así como elementos de lucha (como pueden ser la esgrima). Mezclar ambas características lo convierte en algo verdaderamente llamativo, así como activo. Sin embargo, lo que más lo caracteriza y mejor lo define, es que se trata de un juego de equipo, en el que la táctica de conjunto es superior al juego individual.
El juego consiste en marcar más tantos que el equipo rival. Para ello, el deporte se divide en las dos características que hemos mencionado antes (la pelota y la lucha).
Un equipo de jugger se compone de 8 personas, de las cuales, 5 están en la cancha y 3 ocupan el banquillo. Los jugadores en la cancha se clasifican en dos: Corredor y Defensores.
La medida oficial del campo, consta de un octógono, donde la medida del campo da un total de 20x40 metros, donde la pelota de juego se coloca en la mitad del campo. Cada equipo se sitúa en uno de los extremos más alejados del campo y a la salida de “3, 2, 1, Jugger” han de ir al centro y atravesar todo el campo para anotar.
El Corredor es el único que puede coger la pelota y anotar en la base contraria. El resto de jugadores no pueden interactuar con el balón, sino que su tarea consiste en defender a su propio corredor del equipo rival y evitar que el corredor contrario les anote punto.
Por norma, un partido se divide en dos partes. La forma de contar el tiempo de un partido, se llama “intervalo” y dura 1’5 segundos de media. Dicho intervalo, se representa de manera sonora (a través de altavoces, tambores, etc.), para que todos los jugadores puedan oírlo.
Generalmente, cada parte dura 100 intervalos (lo que equivale a 2 minutos y medio), lo que haría un total de 5 minutos de juego cada partido.
En realidad, esto no sucede así, ya que cada vez que un equipo anota punto, ambos regresan a sus respectivas bases, parándose el tiempo de juego. Además de ello, al tratarse de un deporte táctico, se les da un tiempo de reflexión (breve), para comentar cuál va a ser la próxima jugada que realicen. Al terminar una primera parte, además, si los equipos lo solicitan, se les concede un tiempo de entre 1-2 minutos de descanso.
Por tanto, un partido de jugger, de media, debe durar unos 20 minutos.
Un poco de JUGGER.
